El Porqué del Blog...

Somos un grupo de estudiantes y académicos del Instituto Tecnológico de Tehuacán, interesados en el fomento de la Ciencia y la Cultura en nuestra institución, y en la realidad social y política de nuestro país.
Como estudiantes y académicos participamos activamente dando a conocer nuestras opiniones acerca de los acontecimientos relacionados con estos aspectos actuando como contrapeso moral y ético a la actual Administración del Instituto Tecnológico de Tehuacán.

miércoles, 24 de enero de 2007

DEL CANDIL A LA INTERNET

Algunos de los profesionistas que impartimos clases en el Instituto Tecnológico de Tehuacán nos hemos formado en diferentes instituciones, desde nuestro inicio al conocimiento en el aula hasta el lugar que ocupamos actualmente.

En aquellos tiempos las distancias de un pueblo a otro (ciudad o no) eran enormes, algunos tuvimos que recorrer kilómetros para poder continuar la primaria, la secundaria, algunos otros tuvimos que desarraigarnos de nuestras tierras para poder continuar un nivel medio superior o superior, hablar de maestrías o doctorados estaba fuera de nuestra realidad.

Una forma de alumbrarnos fue (¿es?) precisamente por medio de un candil (combustible, mecha y lumbre) y para agotar las distancias, caminar.

Salir del medio en que nos encontrábamos y seguir el camino del conocimiento ha sido un camino que no tiene fin, en el transcurso del tiempo ese candil ha sufrido transformaciones vertiginosas y el conocimiento nos ha rebasado. Asimilar individualmente toda la información que genera la humanidad es imposible.

Para algunos alumnos subsiste esa condición, aunque ya la forma de alumbrarse es ¿otra? y las distancias se agotan por otros medios modernos

Entonces ¿en qué momento se logra la identidad de esos tiempos con los actuales, si parecen disímbolos? ¡De ninguna manera son disímbolos!

El reto es para nosotros los que tenemos la experiencia del candil, nuestro reto es tratar de entender, digerir y darle aplicación a la combinación que resulte de esa experiencia de años y las nuevas formas de aprender.

Quizá exista un escenario en que coincidamos los hombres de hoy y los anteriores: tanta información diaria que genera la humanidad y ¿cuántos lectores habemos?, más que aquella época, quizá.

Hablo del candil y de la internet porque creo representan los extremos de generaciones que en un tiempo (50 años) han visto un infinito mundo de posibilidades y de ninguna manera restarle el mérito a los grandes bienhechores y también malhechores que en combinación nos han hecho posible todo lo que tenemos.